Los circuitos virtuales permiten interconectar a usuarios localizados en distintos puntos geográficos como si se encontraran en la misma red local (entorno LAN. “Local Area Network”), permitiéndoles disponer de todas las ventajas operativas de estos entornos locales.
Son circuitos punto a punto, que se pueden construir utilizando más de una tecnología de comunicaciones. Un mismo proyecto puede solicitar varios circuitos para conectar a todos los grupos participantes en la misma red privada virtual. La capacidad de cada circuito puede variar desde unos pocos Megabits a varios Gigabits por segundo.
Gracias a la coordinación entre las redes académicas y de investigación europeas, resulta posible desplegar estos circuitos virtuales más allá del entorno nacional, por medio de la red académica paneuropea GÉANT, que soporta dichas redes privadas virtuales.